Por su ternura
Esta no es una historia muy larga ni con muchos giros dramáticos, pero considero importante compartirla con ustedes porque tiene un ilo conductor muy hermoso, la solidaridad y la ternura. Es algo que me pasó a mí, Nicole Viera, no a ninguno de los personajes de los que he escrito con anterioridad. Sé que publiqué escritos de este tipo (así como reflexiones) antes, pero por la forma en que lo voy a contar considero necesario aclararlo. Cualquier impresición se debe a mi memoria y cualquier horror ortográfico a la falta de corrector, que en estos momentos catalogo como irrelevante. Un día de invierno de esos en los que parece estar apunto de llover y todos se vuelven tan amorosos como espinas debido al apuro por llegar a sus casas, me encontré en el aprieto de tener que ir a un lugar que no conocía muy bien. Era una zona que visitaba con frecuencia, pero nunca sola y nunca yendo mucho más allá del Mercado Agrícola. Encontré en una esquina a una señora que tenía toda la voluntad